El CAB Burgos presenta tres nuevas propuestas expositivas: Arquitectura de Rafael Navarro, Haggish Flash de kitazu&gomez, y PERturbacións de Christian Villamide.
Arquitectura, la singular exposición propuesta por el fotógrafo Rafael Navarro (Zaragoza, 1940), permite acercarnos a una temática sustancialmente diferente de aquella por la que el artista es sobradamente reconocido. Como ya ocurriera en 2011 en su serie A destiempo, en la exposición que presenta en el Centro de Arte Caja de Burgos CAB, Navarro sustituye el lenguaje del blanco y negro tan característico de su obra por el color, a la par que pone el acento en la composición de las escenas, la elección de la iluminación y en la selección de instantes del tiempo.
Por otro lado, el CAB acoge un proyecto a largo plazo del español Jesús Gómez (Burgos, 1962) y la japonesa Megumi Kitazu (Tokushima, 1975), dos creadores que han unido sus diferentes perspectivas culturales en un empeño conjunto que en formulaciones anteriores ha pasado por casas-estudio en Alemania, Francia y Japón.
Proyecto de arte visual que se concreta en una serie de instalaciones de objetos y pinturas, Haggish Flash utiliza como pretexto una marca comercial ficticia para abordar aspectos de la experiencia humana contemporánea como la multiculturalidad, la identidad sexual y los roles establecidos, la apariencia y el estatus o la relación entre el marketing y el arte.
Finalmente, Christian Villamide (Lugo, 1966) ha concebido un proyecto que para el CAB pivota en torno al paisaje natural y a los espacios transformados por la mano del hombre.
Villamide propone una reflexión sobre nuestro creciente desapego emocional e intelectual con el propio espacio natural. Bajo el título PERturbacións, la instalación se divide en tres espacios: ‘Territorio humanizado’, ‘Jardín aunque no quieras’ y ‘Paisaje redireccionado’,
PERturbacións se articula con pinturas, fotografías y esculturas creadas con acero y hierro cortén, además de madera, mármoles, metacrilatos y otros materiales sintéticos. A partir de esos elementos, el artista gallego trabaja en ideas como los ecosistemas que quedan enterrados con el avance de las ciudades. la parcelación de los espacios naturales, la relación de desafío entre lo natural y lo artificial y el territorio “de altas prestaciones” que generamos artificialmente en pos de una economía de grandes rendimientos.
Fundación Ibercaja convoca este 2019 la novena edición del certamen, de carácter nacional, dirigido a artistas nacidos o residentes en España, de edades hasta 35 años. Cada artista podrá presentar una obra original, fechada en los años 2018 y 2019, que no se haya presentado a ningún otro concurso.
PREMIOS
El certamen está dotado con dos premios que consisten en la venta de las obras ganadoras a Fundación Ibercaja, por valor de 6.000 euros (IVA incluido) en el caso del primer premio, y por 2.500 euros (IVA incluido) en el caso del segundo.
Las obras ganadoras y adquiridas serán incluidas en la colección de arte de Fundación Ibercaja.
PRESENTACIÓN DE OBRAS
Los artistas interesados en participar en el certamen pueden solicitarlo a través del formulario que encontrarán en la página web.
El plazo de recepción de las propuestas en esta primera fase finaliza el próximo 28 de junio, a las 12 del mediodía. Un jurado designado por Fundación Ibercaja seleccionará las mejores obras de esta primera fase entre el 1 y el 12 de julio.
EXPOSICIÓN EN IBERCAJA PATIO DE LA INFANTA
Las obras seleccionadas formarán parte de la exposición del Premio Ibercaja de Pintura Joven 2019 que se inaugurará en la sala de exposiciones de Ibercaja Patio de la Infanta de Zaragoza, en el mes de noviembre.
Además, los trabajos formarán parte del catálogo de la exposición que Fundación Ibercaja editará con motivo de la muestra.
La Sala de Arte Joven de la Comunidad de Madrid presenta la exposición “Rafa Munárriz. Espacio Relativo”, proyecto ganador de la segunda edición de la convocatoria Primera Fase. Programa de Producción Artística Comunidad de Madrid – DKV, que tiene como objetivo el facilitar la realización de la primera exposición individual de artistas menores de 35 años en un espacio institucional y en un entorno profesionalizado en cuanto a métodos de trabajo y recursos.
Rafa Munárriz propone un trabajo sobre el desarrollo de la conciencia espacial en el ámbito de la gran ciudad, que se blinda con avenidas, calles, muros, circuitos, rejas, etc. Todos estos elementos claman su propio lugar en una jerarquía de espacios comunes que el ciudadano lee como códigos de entrada, salida, prohibición o cierre. Munárriz desdobla sus significados, añadiendo la posibilidad de la inacción a estos objetos urbanos.
La exposición aborda el replanteamiento de los modos urbanos de hábitat, más allá de nuestra experiencia como sujetos. Así, el usuario constriñe y llena de significado el espacio vivido a partir de sus modos de hacer y percibir.